La contaminación causada por los residuos plásticos es una de las mayores para el planeta. Pero, ¿cuánto sabemos verdaderamente de ella? ¿Dónde van a parar todos los residuos plásticos que generamos?
La isla basura, también conocida como continente plástico, son grandes aglomeraciones de residuos no biodegradables que, por los flujos de circulación de los océanos, se van acumulando. La más grande conocida es la isla de basura del Océano Pacífico.
Situada entre California y Hawaii, la isla de la basura del Pacífico es consecuencia de los ciclos de viento naturales de los mares que llevan a los desechos que terminan en el mar a crear esta formación de basura flotante. Desde su descubrimiento en los años 70, se había estimado que su tamaño alcanzaba la superficie de Texas. Sin embargo, un estudio realizado por The Ocean Cleanup, ha revelado que se extiende por un millón y medio de kilómetros cuadrados, unas tres veces Francia.
La pesca y los microplásticos, la principal amenaza
Pese al error que suele derivar de su nombre, la isla basura no es algo homogéneo y macizo. Se trata de un conjunto de plásticos y microplásticos, suspendidos bajo columnas de agua que en muchas ocasiones no son visibles, como si se trata de pequeñas islas una junto a otra y que se distribuyen en el agua a lo largo de kilómetros y kilómetros. De hecho, imágenes satelitales no muestran un parche gigante de basura. Así, los microplásticos hacen que el agua de la zona se vea como una sopa turbia que se entremezcla con otros objetos no biodegradables de gran tamaño como, como artes de pesca y zapatos. La mayor parte del montón de basura se compone de objetos grandes, mientras que solo el 8% de la masa corresponde a microplásticos o piezas de un tamaño menor a cinco milímetros.
Estos microplásticos suponen un alto peligro ya que son introducidas en la cadena alimenticia de peces y pájaros causando un daño directo en su salud. La contaminación de objetos grandes proviene especialmente de los residuos de la pesca, un 46% de los materiales de gran tamaño, y suponen una de las grandes amenazas ya que matan la vida marina al atrapar peces y otros animales, como las tortugas, lo que se conoce como pesca fantasma.
Un mar de plástico
La cantidad de plásticos acumulados en estas aglomeraciones ha ido aumentando con los años. La cantidad acumulada alcanza 1.8 trillones de piezas plásticas, esto supone unas 80.000 toneladas de residuos plásticos, ochos veces el tamaño de la Estatua de la Libertad.
Según The Science Insider, para poder recorrer todo el plástico necesitaríamos caminar por 121 días a una velocidad de 5km/ h. Sin embargo, se trata de un ciclo infinito ya que siguen integrándose desechos en estos flujos. De hecho, se calcula que, según el estudio Foresight Future of the Sea, la cantidad de residuos plásticos que llegan al océano podría triplicarse para 2050.
En la actualidad, existen diferentes proyectos para limpiar la basura de los océanos. Sin embargo, el primer es aprender a gestionar los residuos en nuestros hogares utilizando diferentes programas de reutilización y reciclaje.