Los árboles desempeñan un papel vital en nuestro ecosistema: Son nuestro mayor aliado contra el cambio climático y una fuente de vida para muchas especies del planeta.
Según los últimos estudios, el número total de árboles que hay en el mundo es de 3.041 billones, pero esta cifra cada vez es menor, ya que casi 15 mil millones de árboles son talados al año y solamente se siembran unos 9.000 millones en el mismo periodo.
Consecuencias de la deforestación
La deforestación, la tala y la eliminación de los bosques de la Tierra, está siendo una de las principales amenazas ambientales en el mundo en las últimas décadas. La deforestación no solo daña a la tierra, sino que también amenaza a millones de especies de plantas y animales que pierden su hábitat. Además, la deforestación puede contribuir al calentamiento global y al cambio climático, ya que los árboles absorben dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero en la atmósfera.
Los drones, la tecnología al servicio de la reforestación
Por suerte, gracias a la tecnología, han surgido proyectos que pretenden fomentar la plantación de árboles para construir grandes masas forestales que recuperen el ecosistema de nuestro planeta.
Hasta la fecha, una de las empresas que están luchando por esta recuperación es BioCarbon Engineering. Esta compañía británica ha sido capaz de plantar árboles a una velocidad asombrosa con el uso de drones: ¡100.000 árboles cada hora!
El proceso se apoya en dos tipos de drones con diferentes funciones. Por un lado, uno mapea el terreno y lo proyecta en 3D con el fin de que, a través de un algoritmo, se pueda calcular la cantidad de siembra óptima. Posteriormente, los drones con un sistema GPS avanzado, son programados y cargados con semillas germinadas para que automáticamente las dispersen por el terreno.
Además, si se necesita cultivar varias especies de semillas al mismo tiempo en una misma zona, el dron podrá cargarlas en su conjunto, dependiendo del tipo de superficie. Y no sólo eso, si no que permite acceder a zonas poco viables por otros métodos.
Los resultados de este nuevo sistema aportan una dosis de motivación, no sólo por la cantidad de árboles que se puede conseguir plantar en un año, sino por el abaratamiento de costes frente a los métodos que se utilizan actualmente.
BioCarbon, con este proceso llamado “silvicultura de precisión”, ya cuenta con más de 150 flotas de 10 drones cada una repartidas por numerosos territorios realizando labores de reforestación.